El pueblo medieval de Calatañazor, ubicado dentro de la provincia de Soria, está considerado como uno de los más bonitos de toda Castilla y León. A continuación vamos a conocer un poco su historia y si realmente merece tan preciada denominación. Según los arqueólogos, esta localidad data sus inicios entre los siglos III y II aC. Con el paso del tiempo se fueron produciendo asentamientos romanos, musulmanes, germánicos… Esto le dio a la arquitectura general una mezcla de estilos que aún se pueden observar en multitud de detalles. Pese a ello, el que más predomina es el estilo medieval.
El castillo de Calatañazor es una de las edificaciones que mejor se conserva. Se levantó sobre antiguas edificaciones árabes y su origen se estipula entre los siglos VX y XVI, pero no se sabe con exactitud. Está compuesto por la majestuosa torre del homenaje, recientemente restaurada, algunos torreones cercanos, una muralla que se conserva bastante bien y un foso. Otro de los lugares de interés es la iglesia, de estilo románico con una fachada típica que termina en un gran portón arqueado. Pese a ser un pueblo tan rico históricamente, cuenta con menos de 100 habitantes, peculiaridad que seguro nos hará sentir el ambiente familiar y tranquilo de la zona.
Para pasar la noche, el lugar más conocido es la casa rural Calatañazor. Es un caserón que data del siglo VXIII de decoración morisca y habitaciones íntimas y muy silenciosas. Está situado en la calle principal del municipio y en este lugar también se ofrece al turista una amplia selección de la gastronomía local en su restaurante. Al ser un lugar montañoso y húmedo, las setas de la zona son ricas y abundantes, además de las carnes rojas y los patés hechos en el mismo pueblo. Como vemos, es una visita turística muy interesante que merece ser considerada.
Esther JG